Viajar a Marruecos con niños es totalmente factible y puede ser una experiencia muy enriquecedora . Los más pequeños suelen ser los que más disfrutan del contraste cultural, arquitectónico, gastronómico, etc. que ofrece. En Marruecos se presta especial atención a las familias con niños, y no hay razones de peso para no llevarlos con usted. La diversidad de paisajes exóticos, la amabilidad de sus habitantes, así como la presencia de camellos, burros, coches, bicicletas y motos, mantendrán a los niños muy entretenidos y fascinados. Más del 35% de la población marroquí tiene menos de 17 años, por lo que es probable que sus hijos encuentren amigos con los que compartir juegos y risas, lo que hará el viaje más ameno y le dará a usted la oportunidad de relajarse y disfrutar.